Ser mufa está de moda y la ex de Alé joven se sube al carro

Aunque resulte un poco loco, la moda no necesariamente es algo fashion. Y a veces no depende de uno subirse a un carro o no (pregúntenle a Chachi Telesco).
El último ejemplo es el de la fulana ésta de la tele, que baila en lo de Tinelli, tiene un orto como para hacer un carerolazo, está diez veces mejor que la Alfano y ya no sale con el naboleti de Matías Alé. No quería nombrarla, pero sí, es la tímida de Silvina Escudero (en un futuro, cuando esté inventado, acá iría un emoticón de me toco el huevo izquierdo).
Varios medios levantaron la noticia de PrimiciasYa, que para estas boludeces es como Crónica, always first): MDZonline directamente citó la fuente y tiró que Andrea Ghidone, Paola Miranda, Gabriela Figueroa y la Niña Loly (no es que conozca a las otras, pero, ¿quién mierda es la NIÑA LOLY? My god!) cada vez que se la cruzan «tocan uno de sus pechos». Qué poco Minutouno que resultaron los mendocinos, no? Si decían teta los leía muchísima más gente. Si quieren leer más, también está el sitio 24con, cuyo editor quiso hacerse el que leía Página 12 hace veinte años y tituló «¿Gato negro?…«…

Raquel Mancini, lo tuyo es un obispado de la yeta

[Post vendehumo y levanta tráfico] La modelo Raquel Mancini (por qué a las minas que alguna vez fueron modelo se las sigue llamando modelo toda la fuckin vida?) se rompió un tobillo en los ensayos de Patinando por un Sueño, organizado por Tinelli y su ShowFuckinMatch [toque de corrección política].  De esta manera, la rubiales que supo estar buena en la época de las zapatillas con abrojo se quedó sin poder participar en lo que iba a ser, según ella supongo, el «relanzamiento de su carrera», interrumpida por años de mala praxis, cirugías mal hechas, depresión, recuperación de depresión, y más cirugías.

Igual esto en la carrera de Raquel (carrera en los hostpitales, digo), es casi una minucia. Recordemos:

– LA LIPO. Diciembre de 1996: en un mes la internan tres veces (según Nota de un joven Clarín Online). Transcribo un párrafo desgraciadísimo:

«Todo empezó con una lipoaspiración. Por un mal efecto de la anestesia estuve en coma 4 con muerte cerebral. Después, por toda la situación nerviosa y la presión que viví, se me hizo una obstrucción en el intestino delgado. Estuve otros diez días internada haciendo un tratamiento para ver si zafaba del cuchillo. Y zafé, aparentemente. Me fui a casa y a los tres días me agarraron unos espasmos impresionantes. Entonces me operaron y me sacaron un pedazo de intestino delgado donde tenía una úlcera. Todo a causa de los nervios…»

Nótese «me agarraron unos espamos impresionantes» y «un pedazo de intestino». Educadita la nena. Recomiendo seguir leyendo la nota porque se encuentran gemas como «una pelotudez más grande que una casa», o «Dios me dijo ‘bajá, todavía no'».

– EL COLÁGENO: leí de todo por ahí («labios de churrasco», «le transplantaron dos riñones», «si se cae de boca rompe el piso») pero no pude encontrar cuándo se masacró así la cara. (si fue después de lo anterior es tremenda tarada). Antes y después:

¿Cómo pasó de esto

a esto?

Raquelita, nuestro consejo es que te hagas ver con algún brujo, gurú, comprate un Maneki Neko, o el Talismán de Isidorito, o metete en la página de Pugliese. Porque estás hasta las manos.

Y en última instancia, una vida en el campo y alejada de la exposición pública te puede venir muy bien. Aunque sea si te entotora un burro nadie se entera.

Quedate Pancho en tu casa

Resulta que hace unas semanas atrás, Pancho Dotto fue a ver cómo Dolo bailaba por un sueño. La mismísima piernas locas no sólo perdió en la votación contra una piba que habla a lo macho, es un metro más petisa y llegó a la fama por tirarse pedos en Gran Hermano, sino que además se tuvo que fumar el papelón de su ¿manager?. Y resulta que esta semana (eso sí, más calladito) fue e hizo lo propio con Florencia Gómez no se cuánto, también por él ¿gerenciada?.

La forma delicada de explicar esto es al estilo La Nación, que tituló «Pancho Dotto no trae suerte». Pero como la delicadeza no es lo nuestro hacemos formal el pedido:

Flaco, quedate en tu casa y dejá de enlechar a las pobres pibas éstas que ya bastante tienen con tener que ir a mostrar el culo y media vayaina por la tele como para encima tener que ponerle la cara a la derrota (cuando se cae de inmaduro que el culpable só vó).